+40-NASHVILLE

¡Hola! Sí, tal y como dice el título...¡VENGO A HABLAR DE NUESTRO VIAJE A NASHVILLE!
¿Por dónde empezar?
Cuando llevas más de seis años queriendo hacer un viaje así te resulta muy difícil creer que de hecho lo vas a hacer, pero cuando empiezas a coger ropa para llevar, a cargar la cámara de fotos y a pensar en todas las cosas geniales que se pueden hacer en Music City es cuando las cosas empiezan a clarear y te das cuenta de que no estás soñando, de que es cierto que el 13 de septiembre de 2014 ha llegado por fin. 

Y así fue el sábado:
Me desperté sobre las seis de la mañana porque--obviamente--estaba demasiado emocionada para dormir. Joder, ¡que me iba a Nashville! Salimos de casa sobre las nueve y media en dirección a...¡Illinois!
Hicimos dos paradas en ese estado; una para sacar la foto con el cartel y otra para visitar una tienda de música que estaba de liquidación (me dolió mucho, pero no me compré nada. De nada, queridos padres).

Poco tiempo después llegamos al estado de Kentucky. Allí pasamos algo más de tiempo, ya que nos quedamos a comer en el pueblo de Paducah. ¿No es curioso que de los 17 KFC que vi en la carretera solo 2 estuvieran en Kentucky? Fue casi todo en lo que pude pensar mientras estábamos allí. En eso y en caballos. Y en Aiden Stathopoulos.


Y después de Kentucky nos fuimos por fin a Tennessee. Como supongo que imagináis, es un estado muy verde lleno de gente con botas y sombreros de cowboys. No tardamos demasiado tiempo en ver este cartel por primera vez:

Y para entonces yo ya estaba tan nerviosa que no podía dejar de retorcerme en mi asiento. Y en el momento en que vi esta señal creo que me entraron ganas de llorar.
Pero bueno, sigamos contando. No mucho tiempo después llegamos a la ciudad. Aparcamos justo delante del Country Music Hall Of Fame and Museum y fuimos caminando desde allí. Os dejo algunas fotos.







Después de pasear un rato por Broadway...NOS ENCONTRAMOS A ED SHEERAN. LO JURO. A VEINTE METROS. Porque un segurata enorme no me dejó pasar, que si no... Aún quedaba una hora y media para el concierto, así que decidimos recorrer Music Row. He aquí una foto:

Y de siete a once estuvimos dentro de Bridgestone Arena, esperando a Ed Sheeran y, por supuesto, escuchándole tocar. Os dejo un video que grabé de una de mis canciones favoritas:

Pasamos la noche en casa de una chica llamada Karen, muy maja, y el domingo fuimos rápidamente a  Downtown Nashville para visitar el Parthenon que, para los que no los sepáis, es una réplica exacta del de Atenas.
Después de esto nos volvimos para casa, básicamente porque el día siguiente había colegio, y yo me despedí de Nashville hasta la próxima vez que nos veamos que, estoy segura, será pronto.