Si me conocéis lo suficientemente bien os estaréis preguntando qué coño hago yo involucrada en un musical religioso. La verdad es que saber que era religioso me hizo plantearme si ir a las audiciones o no pero, al final, decidí que esa iba a ser mi única oportunidad y era mejor que la aprovechara.
Tuve dos semanas para prepararme para las audiciones, pero como soy un desastre, no decidí qué canción quería cantar hasta la noche anterior (por cierto, fue The Great Escape de Pink). Por alguna razón que sigo sin comprender, no estaba nada nerviosa.
La semana siguiente salieron las listas del cast y crew, ¡y encontré mi nombre entre los de los solistas! (Concretamente al lado de By My Side, Nº14) (Sí, 14).
Solamente había risas. Nos pasamos horas hablando y cantando, como si no estuviéramos a punto de hacer público aquello en lo que llevábamos trabajando tres meses.
Y la verdad es que las tres noches de actuaciones sonamos mucho mejor que en cualquier ensayo. Ganamos más de $6000 en entradas, a 5$ por estudiante y 10$ por adulto...eso es mucha gente.
Godspell fue una de las mejores experiencias de mi vida.
E incluso ahora, dos meses después, me alegra poder decir que formé parte del musical, y que todos los que participamos somos ahora una gran familia.Far beyond, where the horizon lies and the land turns into a mellow blueness. Oh, please. Take me with you.